Viajar a Japón sin coger un Shinkansen, el famoso tren bala, es como perderse medio país. La indiosincrasia del Japón moderno no se entiende sin el ferrocarril y especialmente sin las líneas de alta velocidad, con sus famosos trenes bala o Shinkansen, que vertebran a las principales ciudades del país y que forman parte del estilo de vida de sus ciudadanos. Zambullirse en el bullicio de la estación central Tokio para coger unos de los inumerables Shinkansen que a lo largo de los siguientes minutos salen hacia cualquier punto del país es verdaderamente una experiencia fascinante y un reto para el turista. No hay que olvidar que la linea más transitada del país, la linea Tokaido, que une las grande urbes de Tokyo y Osaka, tiene, en sus horas punta, circulaciones de Shinkansen cada 3 minutos, en una maravillosa e increible gestión del tráfico ferroviario que deja perplejo al visitante occidental (en 2018, el retraso medio de los trenes en Japón a lo largo de todo el año era de 19 segundos).


Pero más allá de los trenes bala, no hay que olvidarse de las maravillosas lineas secundarias que recorren gran parte de Japón, en las que se pueden transitar por fascinantes paisajes de montaña en cómodos y modernos trenes, que harán las delicias del viajero, que no podrá poder dejar de mirar por la ventanilla los espectaculares paisajes. Afortunadamente para el turista, Japón puede recorrerse muy facilmente en tren, y mucho más con el Japan Rail Pass, una especie de Interrail para extranjeros que, por poco dinero, permite moverse libremente por la mayoría de trenes del país en unos periodos determinados, una verdadera gozada para los amantes de los trenes y de la cultura oriental. Estas fotos son del verano de 2019, un maravilloso viaje recorriendo algunos de los sitios más interesantes del país, espero que os gusten!!











































Un cafetería entre trenes.
Para los amantes de los trenes, en el sorprendente barrio de Akihabara de Tokyo, centro de la cultura otaku japonesa, lleno de tiendas de electrónica y de productos de anime, manga y videojuegos… y mucho más, se puede disfrutar, alejándose unos minutos del bullicio de las calles principales, de un café en la antigua estación de trenes de Manseibashi, viendo los trenes locales pasar desde el propio andén, convertido en los últimos años en una moderna y singular cafetería. Un paraiso para los aficionados a los trenes, que no puede dejarse de visitar.




Deja una respuesta